El aceite esencial de Árbol de Té posee un efecto antiséptico triple, actúa contra las bacterias, hongos y virus.
Es además bactericida, fungicida, antivírico, cicatrizante, antiinfamatorio, desodorante, expectorante y balsámico. Sus propiedades antisépticas, fungicidas y anti-acnéicas están aceptadas y reconocidas por el departamento de sanidad australiano.
El aceite esencial de Árbol de Té (Melaleuca Alternifolia), es un líquido incoloro que se obtiene por destilación de las ramas y las hojas del árbol de té. Este aceite está compuesto por más de un centenar de componentes, siendo por orden los principales; el alcohol monoterpénico, terpinen4-ol, seguido del alfa-terpineol, alfa pineno, beta-pineno y linalol. Esta mezcla tan especial de principios activos crea una sinergia con una gran actividad antibacteriana y antifungicida a la que los virus son muy sensibles. Además provocan que nuestras células sanas adquieran una gran resistencia a la penetración viral.